La pintura contemporánea ha dado un giro súbito hacia el erotismo, tal como se puede apreciar en la obra de Terry Rodgers, quien es uno de los principales representantes de esta tendencia en los EE.UU.
Sus pinturas también alcanzan a tener cierto toque hiperrealista,
aunque no del todo. Tienden a repetirse en secuencias que nos muestran
mujeres sensuales y glamurosas. Nacido en 1947, es un pintor figurativo conocido por sus lienzos de gran formato que se centran en representar el cuerpo y la sociedad contemporánea con un hiperrealismo lleno de lujuria y a la vez un tanto aasqueroso.
El trabajo actual de Rodgers se centra en retratar la política
contemporánea del cuerpo. Su representación de la vida de ocio de la
clase alta se presenta como una visión icónica de la sociedad actual.
Las pinturas resultantes no son instantáneas tomadas de la vida, ni un
varieté de registros de los momentos reales o situaciones familiares
cotidianas, sino todo lo contrario…